POÉTICAS PLURALES: TEXTO, SONIDO, IMAGEN
Poéticas Plurales: Texto, Sonido, Imagen es un festival de poesía experimental que explora, como el subtítulo señala, las relaciones de la poesía con la palabra escrita, el sonido y la imagen.
Lo que tradicionalmente conocemos como poesía se ha mantenido asociado a la escritura y la cultura del libro, y estos han determinado sus formas de distribución. La expresión poética sin embargo, ha recorrido desde sus orígenes diversos canales de comunicación. Desde la tradición oral hasta la poesía ideogramática, desde los carmina figurata medievales a la poesía concreta, la poesía no ha conocido límites formales. Con el concretismo brasileño de los años 50s se comienza a sistematizar la polivalencia de la expresión poética. Los poetas concretos brasileños dirán: “la poesía es tensión de palabras-objeto en el espacio-tiempo” y con ello dan por finiquitada la linealidad del texto en favor de una escritura que se abre a múltiples direcciones.
El Festival Poéticas Plurales: Texto, Sonido, Imagen reunió muchas de estas expresiones contemporáneas de la experimentación poética. A través de exposiciones, conferencias, talleres y performances, tanto de artistas y teóricos peruanos como internacionales, el público podrá tener acceso a dichas manifestaciones y a su reflexión.
El festival se inicia con la muestra Música Posible una exposición interdisciplinaria que reunió piezas de artistas, poetas y músicos peruanos, que tienen en común su aproximación conceptual hacia el sonido. La muestra exhibió el trabajo de: José Aburto, Gabriel Acevedo, Omar Aramayo, Gloria Arteaga, Carlos Germán Belli, César Bolaños, Leonardo Camacho, Alberto Casari, Eduardo Chirinos, Jorge Eduardo Eielson, Mauricio Freyre, Sandra Gamarra, Gastón Garreud, Heinrich Helberg, Alberto Hidalgo, Jaime Higa, Leopoldo La Rosa, Manuel Larrea, Teté Leguía, Pochi Marambio, Oscar Marimon, Mario Montalbetti, Manongo Mujica, Eliana Otta, PAM, Jorge Pérez Ruibal, Álvaro Portales, Francisco Pulgar Vidal, Juan Ramírez Ruiz, Javier Ramos Cucho, Emilio Rodríguez Larrain, Alejandro Romualdo, Juan Salas, Javier Sologuren, Eduardo Tokeshi, César Toro Montalvo, Ángel Valdez, Juan Pablo Vargas, Enrique Verástegui.
Luego se inauguró la exhibición Inventar la voz que reúne diversas manifestaciones que tienen en común su aproximación a la voz. Esta vez ahondando en diversas prácticas contemporáneas que forman parte de nuestro imaginario: manifestaciones públicas, pregones, hip hop, por señalar algunas, siempre a partir de la experimentación fonética-sonora y diversas exploraciones lingüístico-vocales, que vuelven a hacer de Inventar la voz un evento fundamental en el ámbito de la voz y la poesía sonora latinoamericana. Los participantes fueron: Eduardo Chirinos, Sadiel Cuentas, Domingo de Ramos, Renzo Filinich, Teté Leguía, Doda Lingua, Necrew, Tilsa Otta, Efrain Rozas, Perú Saizprez, Elena Tejada y Maya Watanabe.
Enzo Minarelli, relizó una performance nos acercó a lo que él ha llamado vocoralidad, una conjunción entre lo vocal y lo oral, mediado por las posibilidades electrónicas, su performance vuelca la palabra poética al plano de la voz y el movimiento. Minarelli es además un reconocido teórico de la experimentación poética, encargado de dar nombre a lo que hoy conocemos como Polipoesía.
Dos jóvenes poetas sonoros, el chileno Martín Gubbins y el brasilero Marcio Andre, llevan la poesía sonora hacia los límites de la música experimental, la voz se confunde y diluye con los sonidos musicales para dar cuenta de los actuales rumbos que esta forma poética viene tomando en la actualidad.
Los caminos de la poesía sonora se cruzan con el arte multimedia, con las nuevas tecnologías que permiten la mediación de la voz. En tal sentido la exposición de poesía interactiva del austríaco Joerg Piringer hace confluir esas tecnologías (los celulares iphone con procesadores de texto) para articular una propuesta de experimentación poética en donde se enfatiza la materialidad del texto sonoro y visual y su libre asociación. Piringer crea dispositivos antes que poemas, estructuras abiertas antes que versos, para que el público sea el encargado de determinar la forma final del poema.
Dos propuestas musicales peruanas fueron las encargadas de darnos una pauta de la actual relación de la poesía y el rock y la voz y la música experimental. El grupo Cocaína hizo una especial musicalización de los poemas de Jorge Pimentel, incluidos en su libro Ave Soul. Cuadrado Negro, por su parte, realizó una performance sonora de noise en donde la voz es también un elemento que es llevado a límite.